Al principio, los matrimonios son felices y llenos de esperanza. Sin embargo, a medida que pasa el tiempo, usted o su pareja pueden comenzar a cuestionar la relación. Pueden estar contemplando la separación o incluso pueden estar viviendo independientemente.

Si sueña despierto con la vida sin su pareja, puede que sea el momento de divorciarse. ¿Cómo saber cuándo es el momento de abandonar la relación? ¿Qué otros signos le indican que es hora de divorciarse?

1) Problemas de Comunicación

No es sorprendente que una de las principales causas de divorcio sean los problemas de comunicación. Más específicamente, la falta de comunicación puede llevar a la separación y al divorcio. Una pareja necesita trabajar en equipo. Necesitan ser capaces de acudir al otro para apoyarse y comprenderse. También necesitan ser capaces de hablar de las pequeñas y grandes cosas de la vida.

Debería haber espacio para discusiones que no se centren en quien está bien y quien esta mal. Si usted y su cónyuge sienten constantemente desacuerdo y ya no pueden tener conversaciones sobre las cosas que importan, puede ser una señal de que ha llegado el momento de divorciarse.

2) Falta de Intimidad

¿Cual es otra señal importante de que es hora de divorciarse? La falta de intimidad en el matrimonio puede ser una mala señal. La intimidad es una parte importante del matrimonio. Es la principal diferencia entre la amistad y una relación romántica.

Puede haber momentos de calma o de necesidad de espacio, pero si no puede recordar la última vez que estuvo íntimo con su pareja, puede ser una señal de alarma de que la relación está en problemas.

3) No Hay Confianza

A lo largo de la vida, se supone que su cónyuge es una de las principales personas en las que se puede confiar completamente. Es imposible sentirse cómodo en cualquier matrimonio si no hay confianza. Muchas cosas pueden llevar a la falta de confianza, incluyendo la infidelidad, la mentira y el comportamiento irrespetuoso. No es una buena señal si constantemente cuestiona a su pareja o tiene problemas para creer las cosas que le dicen.

4) Hay Desprecio

El desprecio es un gran asesino del matrimonio. Puede variar desde resentir a su pareja hasta despreciarla por completo. Su humor puede cambiar de positivo a negativo cuando entran en una habitación. Pueden criticar cada una de sus acciones o dejar de tratarle cómo a un igual. Cualquiera que sea la razón del desprecio, ningún matrimonio puede durar si no se abordan estos sentimientos de amargura y rabia.

5) Engañar

Si usted o su cónyuge se engañan el uno al otro – puede ser el momento de un divorcio. El engaño puede ser tanto físico cómo emocional. En la era de la tecnología, hay muchas más formas de engañar a la pareja usando los teléfonos e internet.

Aunque algunas parejas se recuperan después de la infidelidad, muchas no lo hacen. Si su cónyuge le ha sido infiel, puede que sea el momento de buscar consejo y discutir sus opciones de divorcio y separación.

6) Pérdida de Sí Mismo

Algunas relaciones pueden ser agotadoras. Al principio, es embriagador estar con tu pareja. Sin embargo, a medida que pasa el tiempo, puede comenzar a sentir que se ha perdido. Ya no tiene hobbies que disfrute o ya no tiene tiempo para sí mismo.

Tal vez no sienta que solo se queda con su pareja por sus hijos. En cada relación, necesita ser capaz de seguir siendo “usted”. La pérdida del yo puede llevar a problemas en las relaciones incluso al divorcio.

7) Relación Tóxica

Una relación tóxica es aquella en la que la dinámica ha cambiado y está llena de energía negativa. Donde una vez fue feliz, ahora todo lo que siente es temor o desprecio. Algunas relaciones tóxicas pueden llegar a ser mental, emocional o físicamente abusivas. Mientras que las relaciones tóxicas pueden ser trabajadas en la consejeria matrimonial, cualquier tipo de abuso es inaceptable y no debe ser tolerado.

8) No le Importa

El matrimonio puede haber terminado y puede ser el momento del divorcio si ya no le importa la relación. Significa que ya se ha dado por vencido. Esto puede suceder después de intentar la terapia y otras acciones para trabajar en el matrimonio

Sin embargo, también puede suceder sin ningún esfuerzo por salvar la relación. Puede que esté soñando con una vida diferente que no incluya a su cónyuge. Si ya no le importa su relación y ya se ha rendido, es una señal de que puede ser el momento de divorciarse.